El afeitado es un proceso que depende de muchos factores, entre ellos, de la cuchilla que se use, que es por lo que preguntas.
Hay cuchillas con distintos grados de afilado. El nivel de filo es un dato objetivo: no depende de lo que cada cual piense o de como sea la piel de cada uno. El filo se puede medir. En Refined Shave, puedes encontrar una clasificación de cuchillas por nivel de afilado.
El nivel de filo influye muchísimo tanto en el resultado del afeitado, como en la percepción subjetiva de la suavidad: una cuchilla que corta poco, tira del pelo y hace el afeitado menos agradable, o directamente desagradable. Se pierde la sensación de suavidad en el corte, ya que éste no es nada suave.
Por poner un ejemplo, entre las cuchillas que uso habitualmente están las Feather, que tienen justa fama de ser muy afiladas, incluso las mas afiladas. Las encuentro muy suaves y me dan unos cuantos afeitados muy buenos. Apurados y sin irritación. Otras, menos afiladas, me van peor. En mi caso, lo tengo claro: me van mucho mejor las cuchillas de muy afiladas a extremadamente afiladas. De GSB hacia arriba en nivel de afilado.
Por supuesto, hay otros factores que influyen muchísimo también en el resultado, además de la cuchilla. La maquinilla es fundamental. Podrá tener un gap y/o una exposición de hoja mayores o menores. Eso se puede controlar con buena técnica. Pero deben estar bien construidas, quedando las hojas centradas, expuestas igualmente a lo largo de ambos lados y perfectamente sujetas, sin que vibren.
También la preparación de la piel y el vello facial es decisiva. Un buen jabón, con una espuma densa, protectora y deslizante, hará que se pueda minimizar la agresión que el afeitado supone para la piel.