Frankincense escribió
Amigos del foro (y también los amigos de Mendrulandia) pasen a la botica, hoy hablamos de un detergente aniónico sintético muy empleado en jabonería, el cocoil isetionato sódico (SCI). Se trata de un syndet muy suave, sólido, de detergencia media - baja, y por tanto muy respetuoso con la piel. No se si todos han tenido ocasión de probar la pastilla de jabón de baño Dove. Es altamente probable, ya que es el más vendido en España, después de Heno de Pravia, y por delante de la Toja. Si lo han probado, recordarán su suavidad, esa espuma hidratante, y absolutamente cremosa. ¿Su secreto?. Pues eso, es el SCI. Aquí está su fórmula:
Cocoil isetionato sódico: 50 %
Ácido esteárico/ácidos cocoicos: 25 %
Jabón pellet: 10 %
Isetionato sódico: 5 %
Cocamidopropilbetaina: 3 %
Cloruro sódico: 2 %
Agua: 5 %
No es sorprendente que también este syndet haya llegado a la mente de los jaboneros del afeitado. Con fines didácticos, haré alusión a la formulación de dos jabones con una extraordinaria reputación y desempeño: Saponeficio Varesino y Barrister and Mann.
Uno de los jabones más complejos en su fórmula, y quizás el mejor estudiado desde el punto de vista de la dermofarmacia (según mi amigo @"ischiapp" es también el mejor del mundo) es del Saponeficio Varesino. Esta es su INCI ( Fórmula beta 4.3):
Aceite de coco, ácido esteárico, cocoil isetionato sódico, aceite de colza, aceite de girasol, agua, hidróxido potásico, coco glucósido, oleato de glicerilo, eritritol, aceite de ricino, aceite de ricino hidrogenado, hidróxido sódico, cera de carnauba, cera de abeja, extracto de maná, extracto de raiz de helecho, galactoarabinano, manteca de Illipe, perfume, aceite de macadamia, sucrosa cocoato, manteca de karité, aceite de almendras, almidón de arroz, goma xantana, glicerina, ácido esteárico, cloruro sódico, acetato de tocoferol, aceite de pepita de uva, ácido cítrico…
Veamos ahora la INCI del Barrister and Mann Reserve, en cualquiera de sus 6 aromas diferentes:
Ácido esteárico, glicerina, agua, cocoil isetionato sódico, sebo, hidróxido potásico, aceite de cártamo, leche de coco, hidróxido sódico, aceite de ricino, sucrosa cocoato, lactato sódico, perfume, acetato de tocoferol, etilendiamina disuccinato trisódico...
Y la comparamos con la versión previa del B&M, más habitual, sin SCI:
Ácido esteárico, agua, glicerina, sebo, hidróxido potásico, aceite de ricino, manteca de karité, hidróxido sódico, leche de coco, perfume, aceite de cártamo, aceite de hueso de palma, alantoína, lanolina, citrato sódico, acetato de tocoferol, hidrolizado de proteina de seda. ..
Empezando por el jabón de B&M, lo que observamos es que la primera versión, aún comercial, no emplea casi aceites ricos en laúrico o mirístico, apenas algo de aceite de hueso de palma o palmiste (kern palm oil). El resultado es una baja espumación, pero alta cremosidad. Para muchos usuarios esa textura de crema es la ideal, tipo yogur. En la nueva formulación Reserve se añade la pareja SCI/sucrosa cocoato. Esto mejora la espumación, a pesar de eliminar el aceite de palmiste, baja ligeramente el pH, e incluso aumenta la cremosidad, haciendo innecesarios parte del sobre engrase, y superfluos activos como la lanolina, la alantoina y la proteina de seda, que había en la primera versión. Si alguien piensa que añadir SCI abarata la fórmula, no es el caso, al contrario. El SCI es un syndet caro, 30 veces más caro que el odioso SLS, y el doble de caro en peso que el aceite de coco. La intención de B&M es mejorar la fórmula y simplificarla.
En el caso de Saponeficio, que fue pionero en el uso de este syndet en afeitado, el problema nunca fue la espuma, ya que emplean aceite de coco, que por si mismo sería suficiente. Pero la adición de la trilogía SCI/sucrosa cocoato/coco glucósido, un equipo emulsionante efectivo, produce una cremosidad extraordinaria con los aceites del sobre engrase, con aumento de la hidratación y su filmogenicidad, y unas características de espumación mucho más modulables por el usuario, que puede obtener una textura variable y siempre aceptable, al gusto de cada cual, en función de la ratio de agua y de cómo la trabajemos.
Mi experiencia en jabones de tocador con SCI es limitada, pero suficiente para poder afirmar que mejora su suavidad (es como añadir proteina de seda). Además aumenta la conservación, sin necesidad de conservantes, consigue mejor espumación en aguas duras, y permite rebajar el pH significativamente. Por lo demás, es un aditivo obviable. Lo empleo en contadas ocasiones, al 10 %, y aún es mucho, enmarcado como estoy en una tradición clásica y purista, que intenta prescindir de lo sintético (incluyendo las fragancias), reconozco que a veces de manera prejuiciosa e injusta. En jabones de afeitar, ni se me ocurriría. No hay necesidad, y es otra ruta.
Es que el SCI es absolutamente sintético, no tiene ni un átomo de natural. Al principio si, hace cuarenta años. El isetionato se esterificaba con ácidos hidrolizados del aceite de coco natural. Pero los ácidos de cadena corta eran volátiles y los insaturados del coco enranciaban, y el conjunto también volátil, hacía que el SCI oliera mal. Así que ahora los ácidos del coco se fraccionan, y sólo se emplean los saturados de cadena media (C12 - C16). Del coco no queda nada. Finalmente, los ácidos cocoicos fraccionados se esterifican mediante catalizadores metálicos con el isetionato, a su vez obtenido del metabisulfito sódico y el óxido de etileno:

¿No les estaré aburriendo, verdad?.
Me llama la atención que Saponeficio Varesino se enmarque también en una tradición clásica artesana, con ingredientes bio o naturales, rehuyendo lo sintético por sospechoso de pernicioso (bien para la piel, bien para el ecosistema), como se aprecia a través de su declaración comercial:
100% vegetable (except fragrance)
NO palm oil (forest protection)
NO preservatives / chelators / antioxidants of chemical origin
NO petroleum, mineral oils, dyes, parabens
NO EDTA – SLS – BHT – SLES – PEG
y sin embargo añada un syndet en la parte alta de su fórmula. Insisto en que el SCI es un syndet seguro y suave, pero también lo son algunos de los ingredientes que denosta SP en su slogan, y por ello advierto cierta contradicción.
Me gustaría que los usuarios del Barrister and Mann de formulación Reserve nos contaseis vuestra experiencia y comparación con la fórmula original, sin SCI. ¿Habéis notado una mejora importante?.
A título personal, no es que tenga nada contra el SCI, pero lo considero un aditivo sin poesía. Cuando entramos en el terreno de la alquimia y la poesía, es más difícil explicarse. Les contaré un chiste, para que me entiendan:
Son dos vascos que están cogiendo setas en un bosque. De repente uno se encuentra un reloj bajo unos helechos, y grita emocionado:
- Oye Joseba, ¡ que me he encontrado un Rolex !
Y contesta Joseba:
- Anda Patxi, déjate, déjate. ¿ A qué hemos venido pues?. ¿ Estamos a Rolex o estamos a setas?.
Pues eso, que uno que anda por estos pagos de la jabonería, está por setas. El SCI será un Rólex de la jabonería moderna, pero le falta la poesía de lo natural, y la sencillez de lo antiguo.
Otro ejemplo, para que me comprendan. Tanto la tartracina (colorante alimentario E-102) como el azafrán (pistilos del Crocus sativa) son productos autorizados y seguros. Pero, si yo les tengo que hacer una paella, ¿ qué prefieren qué les ponga?:

Señorías, no hay más preguntas.
Pues eso es la poesía. No es el coste, no es la seguridad, no es la técnica, no es la efectividad. La tartracina da el color de inmediato y es más barata. El azafrán no. Pero cuando coges el puñadito de hebras, y lo hueles (porque el azafrán se tuesta y huele divino) yo pienso en el jornalero que ha recogido las flores del azafrán a mano y con cesta, bajo el sol lánguido de octubre, en los inmensos campos violetas y ocres de la Mancha, y veo los dedos precisos y rápidos de la mujer que ha mondado delicadamente sus estigmas, y todo lo percibo como un regalo.
Ah, casi me olvido, del título de este hilo: El secreto de grandes jabones. Ignoro si existe tal secreto. Pero desde luego, el cocoil isetionato de sodio, si pretendía serlo, nunca lo fue para mi.