Queridos foreros, Doctor,
hoy el cartero ha llamado a mi puerta. Afortunadamente solo una vez. Me ha traído un paquete que al ver el tamaño pensaba que había comprado la casa de los Simpsons de Lego fake en Aliexpress y no me acordaba, pero no, el remitente era el Doctor. Me he puesto a desenvolverlo, qué embalaje, oigan. Ni los reyes magos que la víspera están envolviendo regalos a las dos de la mañana. Qué meticulosidad, qué cuido. Ahí estaba la botella de colonia. Cuando ya la tenía en mis manos me he percatado de que no habían terminado las sorpresas con el embalaje. Teflón en la rosca para evitar pérdidas, como lo oyen! hace cuánto que no veía un trabajo tan bien hecho como el del Doctor. ¡Teflón! Solo una madre que envía un paquete a su hijo en el frente, o Unabomber en el cumplimiento de sus cosas, podía poner tanto cuidado en un envío!
Y por fin, al tema, a qué huele? Señores, es como uno de esas cajas redondas transparentes de caramelos que mi padre me compraba de niño cerca de la Plaza mayor de Madrid. Caramelos de violeta en estado líquido, un olor suave, fresco, delicioso! La prueba de fuego ha sido dárselo a oler a mi mujer, que suele torcer el gesto con mi pinaud, bay rum, o incluso con el AS de Myrsol "Don Miguel", para mí con un olor delicioso. Pues bien, le ha gustado, tan sólo me ha dicho que un olor de violetas en un hombre es raro. Y qué le he respondido yo? Que también es raro hoy en un hombre afeitarse los siete días de la semana, y de eso no se queja.
Pues ahí queda dicho. Gracias, Doctor, me ha encantado. Me encantará poder comprarla cuando se me acabe este frasco.