Martes, 7 de julio de 2020.
Coñacito musical: Prokofiev, Romeo y Julieta, Orquesta de Cleveland, Maazel, DECCA. Los capuletos (¡lo que tuvieron que reírse de ellos en el cole, con ese apellido!) y los montescos se dieron una vuelta por San Petersburgo y -¡quién se lo iba a decir a Shakespeare!- se pusieron a bailar, bien es verdad que de la mano de Prokofiev, que buenos eran ellos para ponerse en manos de alguien con menos pedigree. Aunque lo cierto es que la cosa estuvo a punto de no estrenarse, entre comisarios stalinistas que calificaban a Prokofiev de músico degenerado y antidemocrático (o sea, igualico, igualico que lo que pasaba en el régimen del nazi del bigotico), y los bailarines, que encontraron la música imposible de bailar. Prokofiev, mientras lo del estreno se decidía en un interminable sí es, no es, se dedicó a publicar suites (es decir, piezas sinfónicas de concierto) basadas en su ballet, que de algo tenía que vivir el hombre. Como es de esperar, aquí hay poco Shakespeare y muy buena música, que para eso lleva la firma del genio arrogante de Serguei Sergueievich. Por cierto, el hombre no tuvo mejor ocurrencia que morirse el mismo día que Stalin -para chulo él, ya digo-, lo que ocasionó que el principal periódico musical ruso le dedicara una breve nota en la página 116... porque las primeras 115 estaban dedicadas a glosar la figura de don Josef Stalin, el otro gran bigote de la etapa más negra de la humanidad y, como todo el mundo sabe, gran músico y mejor persona.
Afeitado:
Brocha: VigShaving tejón 2B
Jabón: RazoRock Mudder Focker
Maquinilla: Blackland Sabre L2
Cuchilla: Personna GEM
Loción: Myrsol Antesol
Bálsamo: Aloe Vera Deliplus
Si no recuerdo mal, esta brocha (de la China Popular y de la otra, que diría Carod Rovira) me costó 7 dólares hace ya unos cuantos años en Alí Express y los 40 días de espera. Si fuera una muchacha (la brocha, no yo), diríamos que es simpática, porque hermosa, lo que se dice hermosa en el sentido martínezsorianesco de la palabra, va a ser que no. Pero amigo, monta un nudo dos bandas que no tiene nada que envidiar a los que traen esas alemanas tan esculturales y pintiparadas llamadas Thater o Shavemac. De lo mejorcito que hay por ahí, se lo digo yo, que de esto sé tanto como el que menos. Ahora, que para bonita, bonita, la Sabre, que tiene lo que técnicamente siempre se ha denominado un cuerpazo. Sin embargo, hoy me ha dejado un poquillo raspón en la zona del mentón, así que la felicidad no ha sido completa. Pero claro, no todos los días va a ser llegar y besar el santo (o sea, a mí, modestia aparte).
Y eso es todo, amigos. Sean buenos si no tienen nada mejor que hacer.
