.
Desde hace un tiempo, vengo utilizando dos after: Brummel, para entretiempo y verano y Varon Dandy para el invierno o épocas de tiempo frío, alternando con algo de Massimo Dutti, que me queda, a extinguir, evidentemente. Entre medias, estoy acabando con todo lo demás (Myrsol de varios tipos, sobre todo).
En cuanto a jabones, he terminado con las barras de Lea y tengo en rotación restos de Edwin Jagger, MWF, L'Occitane y Tabac. Además, estoy empezando a gastar dos tubos de Lea Mentolada que quedaban en el fondo de la estantería.
Las cuchillas suelo usarlas una media de 2 ó 3 afeitados y deben de quedar como trescientas aproximadamente, de marcas diversas.
En cuanto a brochas, tengo en rotación tres de cerda que están ya muy trabajadas (alguna, de cuando empecé con esta bendita afición en 2013).
Lo cierto es que si no tuviera absolutamente nada más, emplearía exclusivamente una o dos maquinillas, las cuchillas que tengo en existencia y Brummel como after, del cual suelo reponer cuando lo encuentro en oferta (los últimos en Arenal, a 5.95 € el otro día, 250 ml.)
He decidido firmemente no diversificar más: La piel de un servidor no está para matices y mucho menos para experimentos, ni el bolsillo lo está para alegrías costosas: Debe ser el signo de los tiempos.
A su servicio.