Formulación simple de base vegetal en la destaca sobretodo el aceite de coco como un elemento destacado de su composición.
Viene embalado en un sencillo envoltorio de papel que contiene dos pastillas de 250 gr. Cada una y que recuerda al formato clásico del envoltorio de cualquier jabón de manos.
Su duración a mi juicio es lo más destacado del producto, ganando de calle la partida a cualquier jabón ya que perfectamente puede rendir durante más de un año haciendo un uso continuado y diario de él.
Otro elemento destacado de este jabón es la carga de la crema, característica en la que brilla de forma especial y que hace de este jabón un producto ideal incluso para iniciarse en el afeitado tradicional. Casi instantáneamente comienza a formarse una suave crema en la superficie del pelo de la brocha, nada más comenzar a frotarla con la pared del jabón.
Califico también notablemente su comportamiento relativo a la formación de espuma, espuma abundante y que se forma con una pasmosa facilidad. Apartado éste ideal para la iniciación.
El ratio de agua no es muy elevado, por lo que habrá que ir con cuidado a la hora de añadir el preciado elemento, aunque siempre dependerá del gusto particular de cada uno. Particularmente me gusta la ausencia de burbujas en la espuma y en este sentido es un jabón que admite poco agua.
La calidad de su espuma la calificaría de decente, se consigue una espuma densa que en la tercera pasada ha perdido el poco acolchado que tiene pero que mantiene en todo momento una buena fijación.
Un apartado que considero bueno es el correspondiente a la protección y lubricación o deslizamiento de la cuchilla, jabón que se comporta de forma más que correcta y siendo ésta una característica que define a los grandes jabones, particularmente me ha sorprendido, quizá porque esperaba un comportamiento peor, siendo éste un jabón tan económico
La sensación en la cara es otra característica encontrada, pues aunque se fija bien en la piel, la espuma no acaba de tener el acolchado suficiente y a partir de la segunda pasada la espuma acaba convirtiéndose en crema, aunque sorprendentemente en ningún momento ésta se seca.
La hidratación post afeitado tampoco es su fuerte, siendo éste un jabón ideal para pieles grasas y habiendo que recurrir a algún after shave sin alcohol que permita regenerar la piel, cuando se trata de pieles secas o normales.
Siendo el sentido del olfato un sentido subjetivo y singular como ninguno, me mueve la cautela a la hora de hacer cualquier valoración referente a su aroma, cuando además parece ser una propiedad ampliamente alabada. En términos siempre subjetivos he de decir que su aroma personalmente me recuerda vagamente el aroma natural de las rosas y aunque su intensidad es notable la asociación que hago concuerda más con el artificial olor a rosas sintético propio del suavizante de la colada. No siendo un aroma especialmente agradable para mí, creo que merece ser reconocida esa intensidad, asociada siempre a jabones más caros.
El precio es otra cualidad que destaca con sobresaliente. Actualmente se puede comprar en Amazon por 7,99⬠lo que supone una proporción de 16⬠el Kg. Valor que lo hace prácticamente imbatible en este apartado comparándolo con cualquier otro jabón.
La conclusión final, es que se trata de un digno aristócrata que representa ejemplarmente a los jabones más populares de Alemania entroncando calidad, sencillez y tradición un pack difícilmente superable por nadie, excepto por ese pueblo alemán capaz de superarse a sí mismo como nadie.
Jabón totalmente recomendable
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