Interesante hilo, que espero que con mi reflote se actualice un poco.
Yo no soy muy sibarita en brochas, y sintéticas no he probado (aún). De las demás he tenido de caballo, que es la que siempre además vi usar a mi padre, pero muy cortas de mocho, estilo barbera y espumando en cara jabón de barrita, y la primera brocha que usé. E iba muy bien. He vuelto a comprar una hace unos días en una droguería, pero de momento creo que por lo largo de su cerdas es mejor para espumar en bol o hasta en la mano. En la cara, difícil, y por ahora no creo que me decida a experimentar a meterle la tijera. Luego las otras que he usado, pues son de cerda, y brochas humildes y muy accesibles, vamos, la que usé tantos años comprada en Hipercor (quizás fuera Vie-Long, quizás Casalfe, pero no recuerdo la marca) y la Omega "Pura Stola" que tengo desde hace casi un año que va a hacer (esta última, 13-14 euros me costó con sus pequeña percha de plástico negro incluída, en una droguería).
Las de caballo, si las que he visto funcionar en mi casa toda la vida, y la que he comprado, espuman como máquinas y no han tenido problemas siendo brochas baratas y de producción con cierta calidad, sinceramente no entiendo la mala prensa (que opinión, dudo) que hay de ellas. Evidentemente no se usan ni comportan igual que las otras (y viceversa), y las habrá como todo, pues pésimas. Pero a poco que decente que sea la brocha y el mocho, la de caballo funciona y muy bien. Por lo visto y hasta usado en su día por mí, hasta para espumar en cara, pero, repito, me temo que para eso con las de caballo, mejor con el mocho bien recortado y corto. Están rápido listas para funcionar y son más suaves que una brocha de cerda nueva. Pero no son brochas "de chafar" contra la cara y hacer círculos así. Así no espuman, y se reían los pelos. Pero usa las puntas, y alucina como espuma eso... y no son tragonas. También secan muy fácil. En estas semanas que vuelvo a afeitarme más asiduamente, ya he visto que la Omega mantiene humedad en las cerdas incluso 3 días, y la de caballo aún estando nueva en horas está prácticamente seca.
Las de cerda funcionan bien. Pero ya he visto que con según qué jabones, formulación o calidad, y como vengas espumando y usando esos jabones, esos cambios la de cerda los hace notar más. Y según necesitara la brocha igual más remojo o menos, más rápido lo hace notar con peor o mejor espuma, o que se la beba, y vuelta a espumar otra vez. Por otra parte, son más duras de nuevas, pero más agradecidas conforme se usan. Para espumar en cara, desde luego son mejores... pero cuando las conoces y has rodado ya un poco la brocha en cuestión, y según el jabón. Si no, yo creo que pueden echar a gente nueva para atrás también.
De las otras dos, de tejón y sintéticas tengo que probar aún. Tengo una de tejón Don Tejón con un mango de maderita cepillada desde hace nada pendiente de estrenar, más o menos de la misma talla de mi Omega de cerda (quizás algo más pequeñita incluso, sobre todo de nudo). Está nueva sin lavar siquiera, y tiene las puntas al tacto más suaves que mi Omega que ya lleva tiempo la mar de suavecita, así que a priori debería funcionar muy bien para espumar en cara, pero aún no la he probado. Del mismo corte que las anteriores, pues es una brocha que la vi en una de mis droguerías por unos 15 euros.
De las sintéticas no puedo ni opinar. Lo máximo que he tenido en mano y tocado es la Wilkinson sintética que tanto hay por todos lados, la de fibras claras. Pero no puedo opinar. Entiendo por las opiniones que leo que para espumar en bol vayan bien (ahí creo que casi cualquier cosa de pelitos suaves y que no se caigan, funciona la verdad). Pero para espumar en la cara, aunque no pinchen las fibras, tengo en mente que siempre será plástico, y que si el jabón o crema es fácil de espumar, pues bien, pero que si no, pues me da que eso por mucho que frotes no espumará, y al ser las fibras plástico también llegarán salpicones por todos lados, menos donde se tienen que quedar por ser demasiado tiesas... 😛 Es un poco lo que me imagino de las sintéticas, aunque ya he leído que no tiene por qué ser así (pero haberlas haylas).