Excelente análisis Alfredo. Personalmente no probé la LEA original, pero tratándose de cremas de casi idéntica composición, donde no caben procesados magistrales ni mayores secretos, y el margen para el cambio en las proporciones es limitado, es asumible que su comportamiento sea muy parecido.
La diferencia de precio, como bien dices, no está plenamente justificada, si bien es cierto que el perfume en la Classic es más notable y la lata algo más cara que el tubo. Sabido es que en una estrategia de marketing de cualquier producto que se pretenda glamuroso o innovador, el precio debe elevarse, para elevar la expectativa del cliente y también su exclusividad. Como decía el Príncipe Salina Il Gattopardo, en la novela de Lampedusa, Se vogliamo che tutto rimanga com'è, bisogna che tutto cambi; a veces hay que cambiarlo todo, para que todo siga igual. Aquí, con LEA classic, han cambiado el contenedor, el perfume...y el precio. Pero, al parecer, sigue siendo igual de buena que la más sencilla.