El tiempo lo dirá. De momento, ninguno de mis churumbeles muestra interés ni en el afeitado, ni en las estilográficas, ni en los relojes, ni en los libros, ni en ná de lo que hace interesante la vida.
Estoy ahorrando para comprarme un drakkar. Voy a organizar un funeral vikingo, quemándome con todas mis posesiones, que se va a cagar la perra...
Credidi me pulchrum felem vidisse...